¿Educar al cliente? (o mejor aprender de él)

Dayana Arévalo - Product Owner

No sé si está todo bien si no nos cuestionamos: ¿Éste realmente es mi “cliente ideal”?

En el día a día nos topamos con distintos tipos de clientes. Unos más animados al cambio que otros y aunque parezca una locura lo que escribiré a continuación: He ahí la oportunidad!! (Y créeme, no me llevo dos días verlo)

La educación del cliente es una función estratégica, no una actividad.

¿Por qué esto podría ser una oportunidad? A continuación te comparto lo que a mí me ha funcionado en un área orientada al producto, no es una receta mágica, al contrarío es el resultado de muchas veces hacerlo mal o de no obtener los resultados esperados 😅

Preguntas y más preguntas.
Aunque no lo creas ese cliente tiene una isla a explorar por ti en su cabeza, un mundo nuevo a tus ojos. No dudes en preguntar: ¿Cómo se imagina su producto?, ¿Qué espera del trabajo en conjunto?, ¿Qué quiere? y ¿Por qué lo quiere? o si su comida favorita es la india o la caribeña. Mientras más preguntas hagas más información tendrás para ese nuevo trayecto que caminarán juntos.

Habla su idioma.
Es muy fácil decir “Debes tener una comunicación más clara y transparente” puede llegar a ser frustrante cuando crees que lo haces pero tu cliente no lo percibe así. Un buen punto de partida para esto es planificar actividades clave, hitos y ciclos de aprobación, lo cual te llevará a desarrollar una comunicación abierta y honesta. Esto no solo ayudará a disminuir la comunicación cautelosa o diplomática, sino que agilizará la retroalimentación y con suerte, pagará dividendos a futuro 💰

Ponte en su lugar y hazle saber qué también es importante que ellos hagan lo mismo.
Si hay algo que no está bien o que está ocasionando frustración para ti o tu cliente, no te preocupes (No está mal que pase). Da un paso atrás y examina si has estado alcanzando tus hitos, cumpliendo la planificación de los sprints dentro de la línea de tiempo acordada y si estas seguro/a de que todo va según lo planeado, es posible que tu cliente tenga expectativas poco realistas, tal vez no tiene toda la información necesaria o simplemente tiene un mal día (Somos humanos, ¿no?). Lo importante es que se puede resolver con una conversación franca sobre prioridades y compensaciones. La honestidad y la transparencia muchas veces son un buen camino. Anímalos a que te entiendan y te ayuden a entenderlos.

Creo que podría seguir, pero eso no haría atractiva la nota ¿No? 🚨

Con el tiempo entendemos que esas experiencias te llevan a lidiar con clientes que pueden ser un laberinto muy fácil o muy complejo, pero he ahí la oportunidad, la de siempre aprender 💪

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